¡Necesito gracia y amor!

Photo by Sharon McCutcheon on Unsplash

El ser madre no es fácil, y si se trata de ser madre de un adolescente, resulta mucho más complicado.
Los adolescentes parecen pequeños adultos independientes, pero la realidad es que aún siguen siendo muy dependientes y te necesitan en todo momento.
También necesitan escuchar que les digas que les amas, que son aceptados, que les demuestres tu amor incondicional, necesitan saber que son amados por sus padres y su familia.

Cuando hablamos de amor incondicional ya es un gran desafío, la naturaleza humana nos enseña que si yo te doy, tú te comprometes conmigo a darme ¿o que me das a cambio? Cuando DIOS  enseña que es el amor incondicional a través de su palabra.

1 Corintios 13:4-7 (PDT)

El amor es paciente y bondadoso.
El amor no es envidioso.
No es presumido ni orgulloso.
El amor no es descortés ni egoísta.
No se enoja fácilmente.
El amor no lleva cuenta de las ofensas.
No se alegra de la injusticia, sino de la verdad.
El amor acepta todo con paciencia.
Siempre confía.
Nunca pierde la esperanza.
Todo lo soporta.

¿Cómo desarrollar todos estos sentimientos en ti y en mi? Sabemos que para poder obtener esto, primero tengo que trabajar en mi corazón, a través de la palabra es la única forma de tener un cambio de juicios y actitudes de forma profunda y real, DIOS nos enseña de qué manera comenzar a trabajar estos cambios poniendo como base este mandamiento:

Mateo 22:37-39 (PDT)

37 Jesús le dijo:
—“Ama al Señor tu DIOS con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”. 38 Este es el primer mandamiento y el más importante. 39 Hay un segundo mandamiento parecido a este: “Ama a tu semejante como te amas a ti mismo”. 

El poder amar a DIOS nos lleva a someter nuestros pensamientos, sentimientos y acciones hacia sus mandatos.

Te quiero compartir un suceso que ocurrió dentro de nuestra familia.

Estando mi esposo en alguna ocasión, reunido con un grupo de amigos platicando sobre diversas situaciones familiares, el  pregunto ¿cómo poder ser un buen padre?, enseguida alguien contestó  ¡¡¡que era muy fácil!!!  -¿Cómo lo puedo hacer? - Siendo el padre que te hubiera gustado tener.

Esto es algo que me hizo reflexionar, es cierto el ponernos en el lugar de nuestros adolescentes me lleva  a recordar en cómo me sentía, como pensaba y como actuaba a esa edad, recuerdo de qué forma me hubiera gustado recibir la ayuda de mis padres y aún de qué forma actuaron ellos conmigo, hoy deseo tomar tanto lo bueno como lo malo para ser una mejor madre.

En una  ocasión mi hijo Angel, fue expulsado de la secundaria cursando el tercer grado, cuando yo me enteré me puse muy mal no aceptaba dicha situación me llené de tristeza y decepción, no quería aceptar que mi hijo no valorará él esfuerzo que hacíamos por darle una educación- Mi esposo me reconfortaba diciendo que nuestro hijo iba a tener tropiezos en la vida  y que él tendría que asumir las consecuencias de sus acciones.

Nos sentamos  a platicar con mí hijo, llorando y reconociendo que no era un buen hijo el preguntó ¿que si ya no lo queríamos? la respuesta del mi esposo fue que él lo iba amar siempre que un nivel académico no iba a restar amor hacia él, que lo amábamos porque era nuestro hijo,lo que él lograra en su vida académica era un beneficio para el mismo, para su propia formación como persona y para poder enfrentar la vida de forma más amplia y segura.

Sin duda hoy somos llamados a ser instrumentos de sabiduría en la vida de nuestros adolescentes, para lograr esto debes ser gentil, humilde, paciente y perseverante.

Efesios 4:2 (PDT)

Sean siempre humildes, amables, tengan paciencia, sopórtense con amor unos a otros.

Quizá hoy seas tú como yo, que esperaba recibir lo mejor de mi hijo, porque según yo en mí forma de pensar consideraba que le daba lo mejor.

Quizá no tengas un esposo en quien apoyarte en situaciones como estas. Pero seguramente DIOS se  ha manifestado a través de alguien que está muy cerca de ti, recibiendo consuelo, dirección y ayuda.

DIOS ha inspirado a muchos hombres y mujeres que han pasado por situaciones difíciles y ellos han dado testimonio por medio de libros que te encausan de forma específica para recibir la guía necesaria para trascender cada una de estas necesidades. Yo estoy recibiendo esa guía por medio del libro "La edad de la oportunidad” del autor Paul David Tripp.

  • ¿Dónde  estás buscado la ayuda tú?
  • ¿Estás buscando la palabra de DIOS todos los días para cambiar juicios y actitudes que no edifican en tu vida y en la de los demás?
  • ¿ Cómo aprovechas cada oportunidad que tienes para educar a tu adolescente cuando hay un conflicto?
  • ¿Estás amando a tus hijos con astucia, humildad y compasión?
  • ¿Sí no es así que esperas? 

Mis queridas hermanas y amigas, deseo que DIOS las llene de sabiduría y amor.